Que la economía global está en crisis no es una aseveración que a nadie sorprenda ya y que vivimos en la era de la digitalización, tampoco.
Si combinamos estas dos visiones de la realidad adecuadamente y bajo el paradigma de Jeremy Rifkin, teórico social y económico, obtenemos un nuevo marco de vida: la Tercera Revolución Industrial.
Este nuevo sistema económico se ha concebido como solución para abordar el cambio climático y crear un mundo más equitativo y fue avalado formalmente por el Parlamento Europeo en una declaración aprobada en junio de 2007.
Rifkin defiende que el progreso se basa en la energía y los sistemas de comunicación le sirven de catalizador, de modo que el internet de alta velocidad 5G en combinación con las energías renovables, todo ello integrado en la sociedad y el medio ambiente a través del Internet of Things (IoT) son la clave del cambio.
Todo esto genera una nueva economía de intercambio en que transforma la vida de los ciudadanos a través de la empatía en ámbitos cada vez más complejos. A día de hoy intercambiamos vídeos, música, conocimiento en forma de Wikipedia, automóviles, hogares e incluso energías renovables; y seguimos avanzando.
El vehículo autónomo y eléctrico, la carretera conectada, la evolución de los edificios y naves industriales a plantas de energía, la batería de hidrógeno, los sistemas inteligentes de distribución de energía, conceptos todos ellos nacidos de las nuevas tecnologías, e incluidas en lo que hemos quedado en llamar Smart City, serán la clave para descarbonizar nuestra economía.
Según este nuevo marco de desarrollo, las infraestructuras y redes basadas en la segunda revolución industrial (redes de telecomunicaciones, la red eléctrica centralizada y los medios de transporte de combustión interna) quedarán superadas y se debe poner el esfuerzo en la construcción y ampliación de nuevas infraestructuras digitales verdes, integradas e inteligentes, que generarán una nueva ola de productividad que seguirá creciendo durante los próximos 50 años para un avance digital y una economía respetuosa con el medio ambiente.
Documental “La tercera revolución industrial: una nueva economía radical para compartir”