La impresión 3D es una tecnología novedosa que, como otras innovaciones recientes, está desarrollando numerosas aplicaciones en muy diversos sectores. La industria automotriz, aeroespacial o las infraestructuras de transporte son algunas de las áreas donde los materiales inteligentes tienen un papel protagonista a la hora de lograr innovaciones clave a través de la impresión 3D y en el desarrollo de estas tecnologías que tanto está destacando nuestro país en los últimos años.
El Departamento de Ingeniería Civil de la Universidad de Alicante y la empresa Applynano Solutions han aunado esfuerzos para lograr resultados uniéndose al proyecto de investigación MASTRO (Intelligent bulk MAterials for Smart TRanspOrt industries), financiado por el programa Horizon2020 y liderado por Acciona.
Conjuntamente trabajan para desarrollar materiales inteligentes que permitirán monitorizar su propia deformación y calentar y descongelar su superficie. Con propiedades autorreparantes y capaces de protegerse del daño, estos materiales conllevan mayor seguridad para los usuarios, haciendo crecer su durabilidad y rendimiento, al tiempo que se reducen los costes de mantenimiento, fabricación y las emisiones de gases de efecto invernadero.
Todo esto traducido al mercado del sector transportes, se convierte en la función de calefacción en pavimentos asfálticos o de hormigón para evitar la formación de hielo o la de percepción de la deformación y del daño en estructuras de hormigón armado, entre otras aplicaciones prácticas.
Y se logra desarrollando matrices desde poliméricas hasta de hormigón o nanomateriales de carbono con funcionalidades diversas que se sustentan en fenómenos físicos como, por ejemplo, la variación la variación de la resistividad eléctrica de un material cuando se aplica tensión mecánica.
Pero este no es el único caso que podemos destacar. En el seno del Instituto de Arquitectura Avanzada de Cataluña (IAAC) se han desarrollado bioplásticos a partir de compuestos orgánicos – concretamente deshechos de naranja – que se utilizan para realizar impresiones 3D y, pueden biodegradarse.