“Las juntas de dilatación ni juntan ni son de dilatación” - Juan Carlos Arroyo
Aunque las normas de prácticamente todos los países del mundo establecen que un edificio largo es aquel que supera los 30-40 metros de longitud, la técnica ha permitido construir edificios de hasta 300 metros.
Es decir, la restricción de 30-40 metros no tiene fundamento más allá de la tradición oral. Hacemos juntas porque hemos bebido de las fuentes de nuestros maestros, las cuales nos decían que había que hacerlas.
¿Por qué se ponen juntas de dilatación?
Se dice que las juntas de dilatación se ponen para “evitar los efectos de la retracción y la temperatura” en las estructuras.
Pero esto nos puede llevar a pensar, ¿por qué en lugar de evitar estos efectos se incluyen en el cálculo de la estructura? ¿Por qué en lugar de tratar de evitarlos no que se combaten?
Parece más razonable olvidarse de los 30-40 metros de distancia entre juntas, y tener en cuenta los efectos de la retracción y temperatura en el análisis estructural.
Veamos entonces qué pros y contras tiene el empleo de juntas de dilatación. Si se usan, alguna ventaja tendrán, ¿no?
Problemas de los edificios “cortos”
- Promoción: se pierde espacio al vender.
- Proyecto: las juntas son difíciles de ubicar.
- Construcción: proceso constructivo muy rígido. Se complican los detalles.
- Mantenimiento: en grandes estructuras, la longitud total de juntas es de varios kilómetros. Mayor coste de mantenimiento.
Ventajas de los edificios “cortos”
- Ninguna.
Bueno, solo una: que los ingenieros que proyectan edificios se ahorran tener que tener en cuenta los efectos de las retracción y la temperatura. Es decir, es un ahorro para el ingeniero de la estructura, una comodidad.
¿Son necesarias las juntas de dilatación?
Visto que no hay ninguna ventaja de peso pasa su empleo, parece adecuado cambiar el razonamiento y pasar a incluir los efectos de la retracción y la temperatura en el análisis de la estructura.
En este fragmento de las Masterclass “Juntas de dilatación: una tradición sin mucho fundamento”, Juan Carlos Arroyo analiza algunas de las fórmulas tradicionales que se han usado para intentar saltarse la restricción de la separación entre juntas (algunas discutibles pero de las que se pueden sacar ideas muy interesantes):
- BLS Barra larga soldada (ferrocarriles)
- “Expansion Joints in buildings” (Academia Nacional de las ciencias de EEUU)
- NTE (Normas tecnológicas de la edificación)
Además, te explica cómo abordar el problema de una estructura "larga" usando para ello tres ejemplos modelizados en Sofistik:
- Un aparcamiento subterráneo “alargado”
- Una estructura de gran superficie
- Una estructura con rigideces grandes en algunos de sus elementos
¿Quieres profundizar sobre este tema? Ver Masterclass completa.
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