Buenos días Juan Carlos,
Yo que vivo en un pueblo pequeño, cuando veo por aquí una obra con muros de sótano (generalmente aquí de viviendas unifamiliares) tanto si son medianeras como si están aisladas, la forma más económica de resolverlo es con un muro de ladrillo macizo de 1 pie de espesor.
Como bien dices, en edificación y más en estas edificaciones tan pequeñas, la mayor parte de los esfuerzos que se generan son axiles y deduzco la eficacia de esta tipología por ese hecho (ya que en cualquier casa que he visitado con este tipo de muros todavía no he visto ningún problema). He visto proyectos de estas casas y el 99.9% de ellos no justifica de ninguna manera la ejecución de esta tipología, yo personalmente he buceado en el EC-6 y me resulta complejo extrapolar al caso real lo que se expone. No he conseguido verificar nunca si un muro de sótano así construido es capaz de funcionar con el esquema de muro de sótano (que imagino que en parte no, pero si que esperaba encontrar algo tipo coeficientes reductores de resistencia).
A lo mejor soy yo el único paranoico con los cerramientos de ladrillo o bloques de hormigón, pero me parecen un recurso muy económico que no se utiliza lo suficiente porque es propenso a muchas patologías bajo mi punto de vista porque no se sabe dimensionar correctamente.
Al fin y al cabo, como ingenieros, estamos obligados a tener en cuenta todos los medios a nuestra alcance y muchas veces por comodidad se hace todo de hormigón armado cuando no es el recurso más optimo. Quizás esto sea un tema como yo suelo llamarlo de "ingeniería popular", pero no es la primera vez que me ha surgido el problema de justificar delante de alguna propiedad esta tipología y tener que cambiar al hormigón por no poder justificarlo.
En resumen, ¿conocéis o disponéis de algún curso o bibliografía al respecto de este tema?
Gracias, un saludo.